jueves, 12 de marzo de 2009

Paolo Giordano, el escritor de lo extraño


“En una clase de primer curso Mattia había estudiado que entre los números primos hay algunos aún más especiales. Los matemáticos los llaman números primos gemelos: son parejas de números primos que están juntos, o mejor dicho, casi juntos, pues entre ellos media siempre un número par que los impide tocarse de verdad. Números como el 11 y el 13, el 17 y el 19, o el 41 y el 43. Mattia pensaba que Alice y él eran así, dos primos gemelos, solos y perdidos, juntos pero no lo bastante para tocarse de verdad”. Este breve fragmento es el que la Editorial Salamandra ha extraído de La soledad de los números primos, de Paolo Giordano, para resumir el argumento de la novela.

Con tan buenas expectativas, no podíamos negarnos a acudir a la presentación que Salamandra y Edicions 62 organizaron el pasado jueves, 5 de marzo, en el Instituto Italiano de Cultura (Barcelona).

Paolo Giordano apareció con cierta timidez por la puerta de la sala de actos. Quizá sea porque todavía no acaba de asimilar que un físico de 26 años como él haya vendido más de un millón de libros en Italia y haya ganado el prestigioso premio Strega de su país con La soledad de los números primos, su primera novela.


Pero esa timidez se desvaneció en cuanto agarró el micrófono y empezó a bromear sobre lo alta que estaba la mesa y la baja que estaba la silla. El periodista Ricard Ruiz fue el encargado de conducir la presentación y dijo, ya desde un principio, que Giordano era un tipo extraño que había escrito una novela extraña.

“En mi novela hay una historia de amor extraña, de esas difíciles de definir, donde hay atracción pero a la vez repulsión”, dijo Giordano, que añadió que “cuando intentamos definir el amor, todo acaba ahí, en el intento”.

La soledad, como podemos intuir por el título, es una parte esencial en esta novela, seguramente sea porque al propio autor reconoce que él mismo vive “entre la soledad inesperada y la soledad llena de plenitud”. Giordano bromeó diciendo que “aunque parezca un poco autista, me gusta comer solo en los restaurantes”.

La novela tiene una gran carga autobiográfica, aunque no es una novela puramente de este género: “Escribir esta novela ha sido un acto de excavación en mi adolescencia y en mi infancia y algunas cosas se han presentado como una venganza de mi pasado”, dijo Giordano.

La soledad de los números primos (La solitud dels nombres primers en catalán) es una novela de amor contenido, como afirma el propio autor: “los personajes niegan la comunicación corpórea, yo no creo tener la capacidad de adentrarme en el interior de los personajes, me interesaba más una visión frontal y lo primero que se ve, entonces, es el cuerpo”. Giordano, que desde el primer momento se había ganado la atención de los asistentes, añadió: “A través del cuerpo sabemos muchas cosas, por ejemplo si un adolescente tiene un tatuaje o la forma de comer… Para mí era más interesante reflejar la personalidad a través de la expresión corporal que explicando directamente los sentimientos”.

La soledad de los números primos (que, en un principio, se iba a titular Dentro y fuera del agua) ha sido traducida a 29 lenguas. En Italia el fenómeno Giordano ha causado sensación, en España, de momento, Edicions 62 y Salamandra nos sirven un éxito más que anunciado.

Manel Haro, Barcelona, texto y fotos - ArtiLiteratura © Ciberanika.com

0 comentarios: